Tu mascota no es solo un animal de compañía, es un miembro vital de tu familia, un ser que te brinda amor incondicional y momentos de felicidad infinita. Entendemos que su seguridad y bienestar son tus mayores prioridades. Por eso, en Datamars Pet, hemos recopilado una serie de consejos esenciales para ayudarte a proteger a tu compañero de vida y asegurarte de que viva una vida plena y segura. 

Seguridad en el hogar

1. Mantén productos peligrosos fuera de su alcance: asegúrate de guardar todos los productos de limpieza, medicamentos y alimentos tóxicos en lugares seguros, fuera del alcance de tu mascota. Algunos productos comunes, como el chocolate, las uvas y ciertos productos de limpieza, pueden ser extremadamente peligrosos para ellos.
2. Asegura las áreas peligrosas: bloquea el acceso a zonas peligrosas como escaleras, balcones sin protección o habitaciones con objetos frágiles. Usa puertas para bebés o barreras para mantener a tu mascota alejada de lugares inseguros.
3. Revisa tus plantas: algunas plantas domésticas pueden ser tóxicas para las mascotas. Investiga y asegúrate de que las plantas que tienes en casa no representen un riesgo para tu amigo mascota. Entre las plantas peligrosas se encuentran los lirios, el aloe vera y el pothos.
4. Cuidado con los cables: los cables eléctricos pueden ser muy tentadores para las mascotas, especialmente para los cachorros y gatitos curiosos. Asegúrate de esconder los cables o cubrirlos con protectores para evitar que los muerdan y sufran una descarga eléctrica.
5. Proporciona juguetes seguros: elige juguetes adecuados para el tamaño y la especie de tu mascota. Evita aquellos que puedan romperse fácilmente o tener piezas pequeñas que puedan ser ingeridas. Los juguetes no solo entretienen a tu mascota, sino que también le ayudan a mantenerse activa y mentalmente estimulada.
6. Ten cuidado con las ventanas y puertas: asegúrate de que las ventanas estén bien cerradas o tengan redes de protección, especialmente si vives en un piso alto. Las puertas deben cerrarse adecuadamente para evitar que tu mascota salga accidentalmente y se pierda.
7. Proporciona un espacio seguro y cómodo: crea un rincón especial para tu mascota donde pueda descansar y sentirse segura. Asegúrate de que tenga una cama cómoda y acceso a agua fresca en todo momento.
8. Educa a tu mascota: el entrenamiento y la educación son esenciales para la seguridad de tu mascota. Enseñarle comandos básicos puede ser vital en situaciones de riesgo. Además, la socialización adecuada ayuda a prevenir comportamientos indeseados y peligrosos.

 

Seguridad en los paseos

1. Usa siempre una correa adecuada: la correa es fundamental para mantener a tu mascota segura y bajo control. Elige una correa resistente y de longitud adecuada, que te permita mantener a tu mascota cerca de ti sin restringir demasiado su libertad de movimiento.
2. Collares y arneses bien ajustados: asegúrate de que el collar o arnés de tu mascota esté bien ajustado pero no demasiado apretado. Debes poder deslizar dos dedos entre el collar y el cuello de tu mascota. Un arnés puede ser una opción más segura para perros que tienden a tirar de la correa.
3. Identificación visible: además del microchip, es vital que tu mascota lleve una medalla de identificación con su nombre y tu número de teléfono. En caso de que se pierda, esta simple medida puede marcar la diferencia para que regrese a casa rápidamente.
4. Mantén un ojo en el entorno: durante el paseo, presta atención a tu alrededor. Evita áreas con tráfico intenso, obras en construcción o lugares donde puedan estar presentes animales agresivos. Mantente alerta a posibles peligros como vidrios rotos, basura o plantas tóxicas.
5. Hidratación adecuada: especialmente en días calurosos, lleva contigo agua fresca y un recipiente para que tu mascota pueda beber. La deshidratación es un riesgo serio durante los paseos, así que asegúrate de que tu amigo peludo se mantenga bien hidratado.
6. Evita el calor extremo: el asfalto caliente puede quemar las patas de tu mascota, así que trata de evitar paseos en las horas más calurosas del día. Opta por caminar en la mañana temprano o al atardecer y elige caminos con sombra.
7. Recoge sus desechos: por respeto a tu comunidad y al medio ambiente, lleva siempre bolsas para recoger los desechos de tu mascota. Mantener las áreas públicas limpias es responsabilidad de todos.
8. Enséñale a caminar correctamente: el entrenamiento en obediencia es crucial para un paseo seguro. Enseña a tu mascota a caminar junto a ti sin tirar de la correa y a responder a comandos básicos como «quieto» y «ven». Esto puede prevenir accidentes y hacer que los paseos sean más agradables.
9. Evita distracciones peligrosas: algunas mascotas se excitan fácilmente con bicicletas, patinetas o otros animales. Mantén un control firme de la correa y, si es necesario, cambia de dirección o utiliza comandos de obediencia para mantener a tu mascota calmada.
10. Utiliza iluminación en paseos nocturnos: si sales a caminar después del anochecer, asegúrate de que tanto tú como tu mascota sean visibles. Usa collares o arneses reflectantes.

 

Seguridad en el coche u otros vehículos

1. Usa un transportín adecuado: asegúrate de que sea del tamaño adecuado, permitiéndole estar de pie, darse la vuelta y acostarse cómodamente. Coloca el transportín en el asiento trasero del coche y asegúralo con el cinturón de seguridad para evitar que se mueva durante el trayecto.
2. Arneses de seguridad: si prefieres no usar un transportín, un arnés de seguridad diseñado específicamente para mascotas es una excelente opción. Estos arneses se enganchan al cinturón de seguridad del coche, manteniendo a tu mascota segura y evitando distracciones mientras conduces.
3. Redes o barreras: para perros grandes que viajan en la parte trasera del vehículo, considera usar una red o barrera de seguridad. Esto evita que tu mascota acceda a los asientos delanteros y ayuda a mantenerla protegida en caso de frenazos bruscos.
4. Nunca dejes a tu mascota sola en el coche: las temperaturas dentro de un coche pueden subir rápidamente. Dejar a tu mascota sola en el coche, aunque sea por unos minutos, puede ser peligroso. Siempre lleva a tu mascota contigo cuando salgas del vehículo.
5. Ventanas seguras: es tentador permitir que tu perro saque la cabeza por la ventana para disfrutar del viento, pero esto puede ser muy peligroso. Objetos voladores, accidentes o el simple acto de frenar pueden causar lesiones graves. Mantén las ventanas cerradas o apenas abiertas y utiliza protectores de ventanas si es necesario.
6. Paradas frecuentes: en viajes largos, planifica paradas frecuentes para que tu mascota pueda estirarse, beber agua y hacer sus necesidades. Estas pausas también ayudan a reducir el estrés y la ansiedad de tu mascota durante el viaje.
7. Evita alimentarlos justo antes del viaje: para prevenir mareos y malestar estomacal, evita alimentar a tu mascota justo antes del viaje. Dale una comida ligera unas horas antes de salir y lleva agua fresca para mantenerla hidratada durante el trayecto.
8. Mantén una temperatura adecuada: asegúrate de que el coche esté bien ventilado y la temperatura sea cómoda para tu mascota. Nunca viajes con tu mascota en la parte trasera de una camioneta abierta, ya que está expuesta a condiciones climáticas extremas y posibles lesiones.
9. Documentación y primeros auxilios: lleva contigo la documentación de tu mascota, incluyendo información del microchip y registros médicos. Además, tener un kit de primeros auxilios para mascotas puede ser muy útil en caso de emergencia.

 

Seguridad alimentaria

1. Elige alimentos de calidad: que estén formulados específicamente para la especie y etapa de vida de tu mascota. Lee las etiquetas y asegúrate de que contengan los nutrientes necesarios para su desarrollo y mantenimiento.
2. Evita alimentos tóxicos: algunos alimentos que son seguros para los humanos pueden ser peligrosos o incluso mortales para las mascotas. Evita darles chocolate, uvas, pasas, cebolla, ajo, aguacate, y productos que contengan xilitol. 
3. Alimentación casera con precaución: si decides preparar comida casera para tu mascota, asegúrate de hacerlo bajo la supervisión de un veterinario o nutricionista animal. 
4. Mantén los alimentos almacenados correctamente: guarda los alimentos secos en recipientes herméticos y en lugares frescos y secos para evitar la contaminación por plagas y mantener la frescura. Los alimentos húmedos deben refrigerarse una vez abiertos y consumirse dentro del tiempo recomendado por el fabricante.
5. Controla las porciones: evita la sobrealimentación, ya que el sobrepeso puede llevar a problemas de salud graves, como diabetes, enfermedades cardíacas y problemas articulares.
6. Agua fresca y limpia: asegúrate de que tu mascota tenga acceso constante a agua fresca y limpia. Cambia el agua diariamente y limpia el recipiente regularmente para prevenir la acumulación de bacterias.
7. Monitorea su dieta: observa la reacción de tu mascota a su comida diaria. Si notas cambios en su apetito, peso, energía, o si presenta problemas digestivos, consulta a tu veterinario para ajustar su alimentación.
8. Evita los restos de comida: aunque es tentador compartir tus comidas con tu mascota, los restos de comida pueden ser altos en grasa, sal y otros ingredientes que no son adecuados para ellos. 
9. Proporciona golosinas con moderación: las golosinas deben ser una parte pequeña y ocasional de la dieta de tu mascota. Opta por opciones saludables y naturales, y evita aquellas con muchos aditivos, conservantes y colorantes artificiales.
10. Consulta regular al veterinario: Lleva a tu mascota a chequeos veterinarios regulares para asegurarte de que su dieta está adecuada a sus necesidades y para detectar a tiempo cualquier problema de salud relacionado con la alimentación.